El primer tiempo de comida nos aporta la energía necesaria para que nuestro cuerpo funcione de manera adecuada. Los alimentos que ingerimos durante la mañana deben ser sustanciosos y nutritivos.
Tradición y hábitos
Cuando pensamos en un desayuno, inmediatamente nos imaginamos pan, huevos, pan, lácteos, panqueques, avena y frutas, entre otros. Casi nunca pensamos en una ensalada, trozos de verduras o vegetales a la plancha. “En las mañanas, los tomates, el apio, el chile pimiento o la lechuga se colocan como decoración o se usan para una salsa o un sofrito”, dice el chef Carlos Quevedo, quien se especializa en comida vegetariana y vegana.
Un desayuno diferente
Si tomamos en cuenta la información anterior, nos daremos cuenta que consumir vegetales y verduras durante el desayuno tiene varios beneficios. “El primero es no aumentar la carga calórica al consumir el azúcar de la fruta, de los licuados o jugos y de la miel, pues estos regularmente están presentes en el desayuno”, explica Avendaño.